El tanatorio El sacristán se encuentra en el municipio alicantino de Almoradí. Fue construído en 1991 para ofrecer a su zona un servicio funerario de calidad, donde los clientes son tratados
con respeto y confianza.
El edificio principal es muy amplio, todas las instalaciones se reparten en una sola planta por lo que las escaleras no serán un problema. Su fachada es sencilla pero todos sus detalles, tanto ventanas como decoración, tienen forma geométrica romboidal, lo que la hace muy especial.
En su interior se hallan las salas comunes y privadas que se encuentran a su disposición las 24 horas. Estas salas están totalmente equipadas de todo lo necesario para que la estancia sea lo más confortable siendo el duelo un momento tan duro.
Sus profesionales están a su disposición para proporcionarle toda la información necesaria y un trato personalizado exquisito para cada cliente.