Este tanatorio recibe su nombre por su funeraria propietaria, la Funeraria Peña; misma que es una empresa familiar en Ribadeo y que fue fundada el año 1914. Desde ese entonces les ha garantizado a todos sus clientes una atención humana, cálida y familiar, elementos muy necesarios para hacer más llevadero el proceso de duelo.
Ante la variedad de servicios que presta en todo momento, podrá comprobar que cuenta con todo lo necesario para dar respuesta inmediata a sus clientes. Entre tanto dispone de 2 cámaras de frío, 3 salas de velatorio climatizadas y muchos espacios más. Pero, además, de ello su equipo se encarga de la documentación y tramitación necesaria, publicación de esquelas en murales, prensa y radio. Si lo desea pueden realizar los grabados y la colocación de lápidas, así como ocuparse de cualquier compañía de seguros y particulares.